CIENTOS DE LEBANIEGOS Y DEVOTOS ACOMPAÑAN A LA PATRONA DE LIÉBANA

2 de mayo 2012

Cientos de lebaniegos y devotos entre los que se encontraban el Presidente del Gobierno Regional, Ignacio Diego, alcaldes de Liébana y Peñarrubia y otras autoridades acompañaron a la Virgen de la Luz desde la localidad de Aniezo hasta el Monasterio de Santo Toribio de Liébana en la que se dice es la mayor de las procesiones que se celebran en una sola jornada en España. Entre veinticuatro y veintisiete kilómetros son los que recorren entre cánticos y rezos los devotos de esta Virgen representada con una pequeña talla a la que en Liébana se le procesa un cariño muy especial.

A las siete de la mañana dieron comienzo los actos oficiales con la celebración de la misa de novena en la localidad de Aniezo, en esta ocasión el oficiante fue el obispo de Santander monseñor Vicente Jimémez y concelebrada por el arcipreste de Liébana, Elías Hoyal y Benito Velarde, quien fuera durante más de cincuenta años el responsable de su culto. Acudieron a la misma gran cantidad de fieles que accedieron hasta Aniezo andando o en coche en una mañana que se presentó bastante fría por el rocío caído durante la noche, pero que a lo largo de la mañana fue mitigándose llegando a quedar una jornada muy agradable hasta la tarde que comenzó a encapotarse el cielo aunque la lluvia no apareció afortunadamente.

Tras la misa, a las ocho comenzó la procesión acompañando a la misma Monseñor Jiménez quien aguantó a pie hasta las inmediaciones de la localidad de Cambarco. Aquí fue recogido por un vehículo de la Guardia Civil que le trasladó hasta el Monasterio de Santo Toribio donde volvió a celebrar la santa misa. Entre paradas y repiques de campana, a la procesión se fueron uniendo los pendones de Cillorigo de Liébana, Potes y Camaleño, produciéndose en esos momentos el cambio de “mando” entre los alcaldes de los ayuntamientos de donde salía la procesión con el que se entraba con el ya ancestral choque de bastones entre los ediles correspondientes. Asimismo, el repicar de campanas de las iglesias por donde pasaba la procesión era llamativo, como también lo era la tradicional colocación de banderas españolas y de la comunidad cántabra en muchos balcones de las casas por donde circulaba la comitiva.

Durante todo el trayecto, el tráfico estuvo regulado por una extensa dotación de la Guardia Civil de tráfico mandada por el comandante Lorenzo Bárez, y la policía municipal de Potes. La parada más emotiva se produce sin duda en la puerta de la Residencia de Ancianos Felix de las Cuevas de Potes. Allí, todos aquellos residente que se valen por sí mismo acuden a adorar a "su" Santuca, otros lo hacen en silla de ruedas y los demás observan con alguna lágrima desde los balcones el paso de la Virgen. En Potes, se realiza parada en las ermitas de San Cayetano y San Roque donde se reza durante unos minutos. Ya en Santo Toribio y a las doce del mediodía, tuvo lugar la celebración de la Santa Misa. Minutos antes, la Virgen y la comitiva, fueron “"recibidas" por el Lignum Crucis que portaba el obispo Vicente Jiménez bajo Palio, padres franciscanos guardianes del Monasterio y por miembros de la Cofradía de la Santísima Cruz. Celebró el obispo concelebrando el Arcipreste Elías Hoyal, padres franciscanos y sacerdotes lebaniegos y cántabros, en total diez concelebrantes. Durante la Homilía el obispo, tras saludar a todas las autoridades presentes, Presidente del Gobierno, Director General de Turismo, alcaldes, Arcipreste de la Santa Cruz, Hermanas Siervas de los Pobres, Comunidad Franciscana y Cofradía de la Santísima Cruz, hizo alusión a los "seis siglos en los que se lleva celebrando esta tradición de forma ininterrumpida y animo a que se siga con la misma, hecho que estoy seguro se producirá viendo como tanto en la celebración de las siete de la mañana en Aniezo, como durante la procesión y en estos momentos en Santo Toribio, entre los devotos he visto a muchos niños y jóvenes que a la postre son los que han de llevarla a cabo, niños y jóvenes que han acompañado a la Virgen de forma espontánea y cariñosa".

Tras la finalización de la Misa, la imagen se bajó hasta Potes y una vez llevado a cabo el rezo del rosario, la procesión comenzó de nuevo la ascensión hasta la iglesia de Aniezo con las paradas en la Residencia de Ancianos, rotonda de Ojedo, iglesia de Frama, cruce de Puente Vieda, La Blanca y la iglesia de Cambarco. Mañana día 4 a partir de las cuatro de la tarde, la Virgen volverá a su "residencia" de la Ermita de Peña Sagra. (Fuente Pepe Redondo).